Ya son cuatro las víctimas mortales que causó una estampida humana durante una fiesta de Halloween en la capital de España. La joven era menor de edad: tenía 17 años
Belén Langdon es la última víctima mortal de la avalancha humana que se originó en un túnel de acceso del pabellón Madrid Arena durante una macrofiesta de Halloween el jueves. Sus padres, que el día de la tragedia se encontraban en Brasil, regresaron rápidamente a Madrid este viernes para visitar a su hija en el hospital.
Todavía queda otra joven en situación de gravedad, María Teresa Alonso, de 20 años, que se encuentra grave pero estable.
La alcaldesa anunció que no habrá más eventos de este tipo en empresas del Ayuntamiento.
En la cadena española Antena3 entrevistaron este viernes a un miembro de la organización del evento, que denunció que se vendieron 20.000 entradas, el doble del aforo del pabellón Madrid Arena (10.600 personas). «Había una lista A y otra B», aseguró el empleado. Segñun dijo, se vendieron a través de Internet las permitidas (10.600), mientras que el resto se repartieron entre relaciones públicas, dj y porteros de discoteca.
Otra grande polémica que ha generado la tragedia ha sido la constatación de que había menores en la fiesta. Belén Langdon era una de ellas. Pese a que la empresa municipal aseguraba que se mantuvieron controles estrictos de seguridad, varios testigos han asegurado que no se les requirió ningún tipo de identificación para ingresar a la fiesta.