En la mañana del pasado jueves murió el perro que fue quemado por una pareja de vecinos a los cuales les molestaba la presencia del animal callajero en Guaymallén.
El caso se conoció por medio de las redes sociales, cuando los vecinos de la calle Azcuénaga al 2200 quemaron cubiertas y árboles luego de enterarse que un hombre y una mujer habían rociado con gasoil y prendido fuego a un perro.
Tras el acto incomprensible, fue trasladado por los mismos manifestantes a una veterinaria de la zona. Producto de las heridas este jueves murió.
La causa quedó en manos del fiscal Tomás Guevara quien imputó a Ricardo Manzo y a su mujer, Soledad Lusesoli, identificados como los autores del hecho. De acuerdo a la investigación el delito es de crueldad animal contemplado en la ley 14.346.