El lunes 2 de mayo a las 16.45 horas, en el monumento a los Héroes de Malvinas, se llevó a cabo el acto para conmemorar un nuevo aniversario del hundimiento del Crucero A.R.A General Belgrano.
Estuvieron presentes, el viceintendente Daniello Cerezo, la Concejal María Argentina Chaile, el secretario de Turismo y Cultura Marcos Stieb, los integrantes del Centro de Veteranos de Guerra y Familiares Tinogasteños Malvinas Argentinas; presidente Román Reinozo; secretario Daniel Castro; tesorero Alejandro Castro; el veterano de guerra, Carlos Pico; la Prof. Silvana Morales, investigadora sobre la vida de Carlos Alberto Valdez nacido en el distrito Copacabana y quien dejó su vida en el hundimiento del ARA Belgrano.
Cabe destacar, que el acto fue organizado por el Centro de Veteranos de Guerra y Familiares Tinogasteños Malvinas Argentinas, recientemente conformado en Tinogasta. En la oportunidad, las autoridades, entonaron las estrofas del Himno Nacional, también la Marcha a Malvinas, para luego depositar una ofrenda floral al pie del monumento a nuestros héroes.
Hace 40 años se producía el hundimiento del crucero ARA ‘General Belgrano’. Es por eso que se conmemora el paso a la inmortalidad de 323 marinos argentinos, quienes dando muestra del juramento que alguna vez realizaron, ofrendaron lo más valioso que tiene un ser humano, su vida, en pos de los intereses de la Nación.
La profesora Silvana Morales, en parte de su discurso expresaba; «Un número que ningún argentino puede olvidar, y menos ignorar, es el que corresponde al total de bajas argentinas durante la guerra que en 1982, libró la Nación Argentina contra Inglaterra y sus aliados. Se podrán discutir muchos aspectos de esta contienda, pero jamás en lo que hace a las virtudes de los que ofrendaron sus vidas por la sagrada causa de la soberanía territorial».
«Por ello comenzamos dando cuenta de esos números, que parecen frios en el papel, pero se calientan al rojo vivo cuando quien los lee tiene la cualidad de transformarlos en Héroes de la Patria. Son los militares y civiles cuyos nombres están grabados para siempre, no sólo en el mármol del monumento de Plaza San Martin y de otros lugares, sino en el mismo granito de la historia» finalizó.