Durante la madrugada del 23 de febrero en Asia, un fuerte terremoto se registró entre la frontera de China y Tayikistán. Reportes preliminares indican una magnitud de 7.1 en escala Richter, perceptible en las dos naciones.
Esto ocurrió en la provincia china de Sinkiang, muy cerca del territorio de Tayikistán y aproximadamente a las 5:30 horas de la madrugada, por lo que sorprendió a miles de ciudadanos.
Distintos reportes de agencias internacionales de detección sísimica indican una magnitud entre 6.8 y hasta 7.3 del terremoto. Hasta el momento no se reportan heridos.